Ingentes
cantidades de plástico en todo el mundo terminan aún en los vertederos,
los océanos o se incineran en instalaciones obsoletas y sin ningún tipo
de control sobre las emisiones contaminantes. Un informe del Worldwatch Institute propone mejorar la gestión de este material a lo largo de todo su ciclo de vida.
Reciclaje e incineración
La recuperación del plástico de la corriente de residuos para su reciclaje, o en su defecto para su valorización energética, puede minimizar notablemente estos problemas.
China recibe el 56% de las importaciones de residuos plásticos que se producen en todo el mundo. Se sospecha que la mayor parte se reprocesa en instalaciones de baja tecnología.
son datos para alarmarse y es que tenemos a china como un gran vertedero mundial.
Grandes cantidades del plástico recogido para su reciclado acaban enviándose de alguna forma a países con una regulación medioambiental muy laxa o casi inexistente.
Y la combustión de este material para producir energía requiere de
estrictos controles de las emisiones y produce residuos problemáticos,
como son las cenizas, al tiempo que su eficiencia resulta relativa, y
muchas veces insuficiente.
Gran parte de la fracción plástica procedente de Estados Unidos,
Europa y otros países con sistemas de recogida selectiva se envía a
China, que recibe el 56% (en peso) de las importaciones de residuos
plásticos que se producen en todo el mundo.
Según relata en su análisis
Gaelle Gourmelon, director de Marketing y Comunicación del Worldwatch
Institute, existen indicios que sugieren que la mayor parte de estos
residuos plásticos importados se reprocesan en instalaciones de baja tecnología,
sin los correspondientes controles de protección medioambiental ni los
sistemas de tratamiento adecuados para la eliminación de contaminantes o
la depuración de las aguas residuales.
Existe también preocupación por el hecho de que estos plásticos de
baja calidad no son reutilizados y son vertidos o incinerados en plantas
que carecen de sistemas de control de la contaminación del aire.
A través de la estrategia conocida como Valla Verde, el Gobierno chino
empezó en 2010 a trabajar en la reducción del número de instalaciones
irregulares.
Alrededor del 4% del petróleo que se consume en el mundo cada año se utiliza para fabricar plástico, y otro 4% se usa como energía en los procesos de fabricación de plástico.
En Europa, en 2012, se recicló el 26% de los plásticos posconsumo producidos (6,6 millones de toneladas), mientras que el 36% se incineró para producir energía. El 38% restante se envió a los vertederos.
En los Estados Unidos, en 2012, se recicló únicamente el 9% de los residuos plásticos (2,8 millones de toneladas) y se desecharon 32 millones de toneladas.
Es evidente !, hay que parar el envio residuos plasticos a china, ya que la incertidumbre en su tratamiento adecuado nos situa en una grave situacion medioambiental, obstaculizada por el hermetismo del gobierno chino ,ya son bastantes los residuos que acaban en vertederos como para seguir haciendo envios a este tipo de empresas.
Desde aqui ,quiero denunciar este escenario que hoy son fuente habitual de actividad comercial de muchas plantas de plasticos en la provincia de Almeria
Desde aqui ,quiero denunciar este escenario que hoy son fuente habitual de actividad comercial de muchas plantas de plasticos en la provincia de Almeria